domingo, 28 de febrero de 2010

THAT AINT NO WAY TO SAY GOODBYE

I loved you in the morning, our kisses deep and warm,
your hair upon the pillow like a sleepy golden storm,
yes, many loved before us, I know that we are not new,
in city and in forest they smiled like me and you,
but now it's come to distances and both of us must try,
your eyes are soft with sorrow,
Hey, that's no way to say goodbye.

Et vaig estimar al matí, els nostres petons profunds i càlids,
el teu cabell sobre el coixí com una tempesta d'or…

TE HE INTENTADO DEJAR

I tried to leave you, I don't deny
I closed the book on us, at least a hundred times.
I'd wake up every morning by your side.
The years go by, you lose your pride.
The baby's crying, so you do not go outside,
and all your work it's right before your eyes.
Goodnight, my darling, I hope you're satisfied,
the bed is kind of narrow, but my arms are open wide.
And here's a man still working for your smile.

LOS PRESCINDIBLES

En este sistema económico el ser humano se ha convertido en un objeto más. Decía Saramago que todos somos desechables no ya a los setenta años de edad , sino que la disfunción radica en que ahora se es prescindible a los treinta. El trabajo ha perdido su papel esencial en la producción y ahora es la primera cosa prescindible. Lo más sencillo y obvio en una crisis es quitarse de encima al ser humano. Así, la principal fuente de ansiedad, por qué no decirlo, de miedo colectivo e individual es ser prescindibles. Todos lo somos, tanto el obrero como el director general. El trabajo ya no es el principal valor productivo es un complemento del sistema, el primero que desecha. Quizás alguien debiera plantearse la bondad de esta
situación y reorganizar el modelo productivo y volver a poner en el centro de interés a las personas y no a un sistema que nos convierte a todos en nada.

miércoles, 24 de febrero de 2010

EL MIEDO- EDUARDO GALEANO

El hambre desayuna miedo.
El miedo al silencio aturde las calles.
El miedo amenaza.
Si usted ama, tendrá sida.
Si fuma, tendrá cancer.
Si respira, tendrá contaminación.
Si bebe, tendrá accidentes.
Si come, tendrá colesterol.
Si habla, tendrá desempleo.
Si camina, tendrá violencia.
Si piensa, tendrá angustia.
Si duda, tendrá locura.
Si siente, tendrá soledad.